Todo individuo que se precie de ser guayaquileño de verdad debe en mi concepto haber hecho cuatro cosas antes de pasar a mejor vida
Degustar de dos frias cervezas hablando temas de actualidad en el Bar Restaurant El Manantial en la Victor Emilio
Comer cangrejos en el restaurant Ochipinte
Haber visto un clásico del astillero
Haber estado en una procesión de Cristo del Consuelo
Sin duda me faltaba la ultima , aprovechando una promesa que hice con el flaco de la cruz me organice con mi concuñado para asistir a la mas multitudinaria procesión que se realiza en el país, es así como a las 4:30 am recibí la puntual llamada de el en este viernes santo, nos dirigimos pues en un taxi hasta el sector caliente de Cristo del consuelo ,en circunstancias normales el desembarcar del automotor a esas horas de la noche significaría la aplicación de una llave a la garganta con tres puñaladas incluidas en la espalda sin dejar de contar el robo de todas nuestras pertenencias , pero dada la magnitud del evento siendo ya las casi 6 de la mañana cientos de policías se encuentran apostados en mas de 18 cuadras lo que nos da cierta tranquilidad.
Por la hora salgo sin desayunar por lo que primero que hago es buscar que comer , entre las mas variopintas opciones que van desde un pescado entero frito con café hasta agua de yerbaluisa con un pan que es cogido con las mismas manos con que el vendedor cobra la plata: opto por una tostadita y el clásico batido de melón, el cual devóro con singular hambre sin dejar de hacer mis oraciones internas a mi amigo el crucificado de que estos manjares no hagan mella en mi organismo peor en media procesión ¡!!
Comienzo a analizar a todo humano que transita en el lugar faltando pocos minutos para que se realice el acto ya en su 49ava ocasión, un arco iris de personas desfilan ante mi posición privilegiada sobre la acera que me permite ver a todos los asistentes o a casi todos: Borrachitos, gente humilde uno que otro pelucon, negros , cholos , blancos y zapallentos .Arranchadores, maricones , chulos , prostitutas, amas de casa, empleados de banco , empleadas domesticas ,todos con un mismo fin el poder tocar a una imagen de madera que simboliza a un Cristo crucuficado que esboza un rostro de dolor y clemencia que al verlo salir con devota puntualidad 7 en punto de la mañana hasta a mi me conmueve.
Comienza la procesión , mares de gente tratan de seguir la carroza que lleva la imagen , la verdad conmueve la Fe que que todas las personas dan al acto , lagrimas comienzan a rodar , gente desde sus balcones tira petalos de rosa a la imagen , horas después estas mismas personas hechan no petalos sino agua ante el ruego de los asistentes por el inclemente sol que nos depararía minutos después San Pedro .
Sin pensarlo ni quererlo estoy en medio del tumulto la gente se empuja con tal de acercarse al cristo , me rio al escuchar a una señora pedir que no empujen , mas disfruto de la ocasión pues estoy viviendo , que tantas veces vi en la televisión en las noticias de todos esos viernes santos, ocasiones en las cuales de seguro estaba en la playa disfrutando de la brisa marina ,mas en ese instante no disfruto sino que trato de aguantar brisas de aire caliente de miles de personas respirando y de vez en cuando de olores corporales nada agradables pero lo tomo hasta con gracia los comentarios de la gente que marcha reprochando al autor de tan desagradables gases “OYE COLORADO CUANTAS FANESCAS TE COMISTE” “FUE EL GORDOSSSSS “ Una señora reprocha los chistes y reclama un poco mas de seriedad y respeto dada la ocasión …
El sol inclemente azota nuestras cabezas la gente comienza a desertar vamos por la 10ma estación , pregunto al un caballero al lado mío que cuantas son ante lo cual me advierte que CREE son quince , ya la situación se torna incomoda pues el calor bordea los 40 grados c y son las 10 am y todavía faltan unas 3 horas mas, efectivos del cuerpo de bomberos con mangueras refrescan a la multitud que extasiada reza , llora , canta ,empuja, insulta ……
Ya casi medio dia y después de 5 horas de estar de pie mi cuerpo me pide retirarme sin darme cuenta que la procesión ya casi termina , con mi acompañante tardo mas de cuarto de hora para poder escapar de la marea humana hacia calles aledañas que nos permitan primero comprar algo helado para beber y segundo un tomar un taxi que nos lleve a casa. El taxista que nos conduce al hogar al verme sofocado prende el acondicionador de aire y pregunta que tal la procesión , comienzan mis letanias de queja que el calor , que los pedos que esto que el otro… el veterano conductor me ve y me dice , “ Si se da cuenta que eso es nada en comparación a lo que El paso cuando murió “……… El resto del viaje a casa fue en total silencio la frase del hombre del volante sin duda caló en mi acompañante y en mi , quien sabe y vuelva el próximo año …. Quien sabe…….
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